Vistas de página en total

martes, 23 de abril de 2013

LOS BASUREROS DE BILDU. ¿INCINERAMOS RESIDUOS O QUEMAMOS CONTENEDORES?


 ¿Hay una tercera vía entre el sistema de recogida de residuos Puerta a Puerta (PaP) que quiere imponer Bildu en Guipúzcoa y la incineradora de Zubieta que apoyaban PNV, PSE Y PP? Sí, se llama democracia real.
     El pasado fin de semana, los vecinos de Legazpi le dieron un sopapo a Bildu con una consulta popular que rechazó contundentemente que sus bolsas de basura cuelguen a las puertas de sus casas como si fueran árboles de Navidad. Votó más de la mitad del censo. La inmensa mayoría dijo NO. 3599 vecinos se opusieron al PaP y sólo 61 lo apoyaron. Bildu obtuvo la alcaldía en 2011 con 2002 votos.
Bildu quiere que siempre sea Navidad.
      Que quienes parecen inventores de la democracia directa y el Derecho de Autodeterminación reciban una cucharada de su propia medicina me causó tal cachondeo que lo conté en Facebook. Mikel Fernández Anguiano, de Vitoria, me respondió con un vídeo de 5 minutos y el siguiente comentario: “si estás a favor del quinto contenedor, estás a favor de la incineradora”. También añadió que los legazpiarras “son unos vagos y les jode sacar una bolsa de basura distinta cada día a las 8 de la mañana”. Da la casualidad de que Mikel vive en el Casco Histórico de la capital alavesa, donde hay un sistema de recogida neumática de basuras con buzones en los que se depositan las bolsas.
       Mi amigo fotoperiodista David Aguilar Hendrickson terció en el debate con el siguiente comentario: "A mí nadie me ha preguntado si quiero recogida PaP en Vitoria y me molaría que la hubiese como en Aarhus (Dinamarca), pueblos de Mallorca o en Vilassar de Mar (Catalunya), Niort (Francia) o Monza (Italia). El PaP es un excelente sistema de recogida selectiva, que sólo tiene un problema: pone en cuestión las comisiones cobradas por... Me callo".
      David Aguilar tiene razón: los políticos están ahí para llevarse comisiones pero ¿qué pasa en Dinamarca, Francia o Italia?
Aarhus: la basura no se ve ni se huele.
      En Aarhus (Dinamarca) los ciudadanos son considerados como clientes y fueron consultados antes de implantar nuevas iniciativas. Después de preguntarles qué modelo querían, casi 1000 contenedores fueron semienterrados en Aarhus para la clasificación de residuos.  
      En Niort (Francia) hace ya casi 20 años 1500 domicilios recibieron contenedores específicos (de 120 y 240 litros) y un cubo de basura en el que recoger los residuos de cocina y jardín. Los centros y minicentros de recogida también fueron equipados con contenedores para los residuos biodegradables. Ver páginas 34 a 36 de este documento de la UE.
Legazpi usa el derecho a decidir...
     En Monza (Italia) cada domicilio recibe un cubo de 10 litros para los residuos biodegradables y 100 bolsas al año. Los cubos se colocan en la calle los días de recogida y se vacían manualmente. Los edificios altos, los bares y las tiendas de frutas han sido provistos con contenedores con ruedas de 240 litros para el almacenamiento temporal de los residuos separados. (Páginas 48 a 50).
      Las diferencias saltan a la vista. En Dinamarca, Francia o Italia nadie cuelga cada día una bolsa de basura distinta a la puerta de casa. En Dinamarca, Francia o Italia los gobernantes no imponen: crean conciencia colectiva. Con su Política de Lentejas, Bildu puede estar causando un daño irreparable al medio
ambiente. Durante décadas, los vascos hemos asistido a la quema de cientos (si no miles) de contenedores de residuos. Estas acciones no fueron denominadas Contaminación Terrorista sino Kale Borroka (lucha callejera). En el subconsciente de la izquierda abertzale esos contenedores parecen los culpables del pecado original. Y no, la incineración de residuos nunca será la solución. La quema de contenedores tampoco. Durante el fin de semana de la consulta popular de Legazpi, la Kale Borroka visitó de nuevo esta localidad guipuzcoana. Dos contenedores fueron quemados con cócteles molotov.. La Ertzaintza se encontró cuatro artefactos incendiarios sin usar a las puertas del Instituto de Legazpi. ¿Los abandonaron para reciclarlos?


2 comentarios:

j.mikel dijo...

El parlamentario de EH Bildu, Oskar Matute, ha señalado que las condiciones en que se ha desarrollado la consulta popular en Legazpi, en Gipuzkoa, sobre el sistema de recogida de basuras 'puerta a puerta' hace que ésta deje "resquicios para la duda" y ha abogado por fijar unos "parámetros" que garanticen el "buen desarrollo de una consulta popular".

Matute se ha referido en declaraciones a Radio Euskadi, al hecho de que más de 3.599 vecinos de Legazpi hayan votado en contra de la recogida de basuras 'puerta a puerta', lo que supone el 50,6 del censo electoral de la localidad, gobernada por Bildu.

Tras defender que sería "un gran avance" lograr un acuerdo para establecer "cuáles tienen que ser los parámetros que garantizan un buen desarrollo de una consulta popular", Matute ha considerado que la desarrollada este fin de semana en Legazpi deja "resquicios para la duda".

"Cuando una consulta popular como en la de Legazpi permite que puedan votar a través de terceras personas aquellos que ese día no quieren ir a votar, creo que deja resquicios para la duda", ha indicado, para añadir que "lo primero que hay que ser es rigurosos". Asimismo, ha recordado que, hace diez años, cuando se instaló la "central térmica en Amorebieta, gobernaba el PNV, y la formación jeltzale "se pasó por el arco del triunfo la consulta popular que se hizo".

José Manuel Cámara Sáez dijo...

A ver si Óskar Matute va a ser el Capriles de Euskizofrenia... "Que si hay resquicios para la duda en los resultados, que si se vota a través de terceros, que si la abuela fuma como una incineradora..." ¿Repetimos la consulta? Si el "pajarito Chaves" levantara la cabeza...